Mansa Musa (el hombre más rico que la historia ha conocido)
Mansa Musa Durante la época del imperio Malí, Medio Oriente se encontraba en plena bonanza. El imperio conquistó once ciudades que reflejaban su opulencia y fortuna. "Dios le sonreía a los fieles" decía Mansa Musa. Aún los más pobres y desvalidos súbditos y esclavos vestían bellos ropajes de la mejor seda persa; su gobernante no dejaba que sus vasallos y ciudadanos vistieran harapos, y menos pasar hambre, por tal motivo hacía traer toneladas de bellas telas y pieles para cubrirlos, e invertía el oro de sus minas en el trabajo de los campos para alimentar a su pueblo con sus cosechas y ganado. Los Mandén del África occidental vivían bien pero, esta generosidad y riquezas no eran conocidos fuera de sus fronteras, en esto eran muy reservados y por esto sus enemigos y rivales de la región subestimaban su capacidad de guerra y los menospreciaban. Mansa Musa no seguiría dejando que esto fuese así. Oró a Alá y decidió hacer su peregrinación a la Meca, pero no iría sólo no, tras él...